RM 020
CALIBRE RM020
Movimiento tourbillon de cuerda manual con horas, minutos e indicadores de reserva de marcha y funciones.
En sus orígenes, el reloj de bolsillo era un símbolo inequívoco de libertad y prestigio, un objeto personal gracias al que se dejó de depender de los relojes de las torres o del reloj de pie de casa o de la oficina para saber la hora. Debido a la portabilidad de este tipo de reloj, el primero en poder llevarse a todas partes, los relojeros tuvieron que desplegar todo su savoir-faire para llevar su esencia mecánica a la perfección.
Richard Mille, poco dado a aceptar sin más el pasado, ha echado la vista atrás, hasta de la Edad de Oro de la relojería, para reinterpretar un clásico con un planteamiento rotundamente moderno y mejorado. El resultado es un reloj personal que volverá a emocionar a los coleccionistas contemporáneos: el reloj de bolsillo tourbillon RM 020.
El RM 020 es el primer reloj de bolsillo diseñado con una platina de nanofibra de carbono, empleada originariamente en aviones de la Fuerza Aérea de Estados Unidos. La platina está hecha de un material isotrópico compuesto, creado a partir de nanofibras de carbono moldeadas a una presión alta de 7500 N/cm2 y a una temperatura de 2000 °C, lo que resulta en un material de una elevada estabilidad mecánica, física y química en todas direcciones. Asimismo, el material es idóneo para garantizar la estabilidad del tren de engranajes pese a estar expuesto a temperaturas y condiciones variables.
El escape de tourbillon —inventado en el siglo XIX, en un primer momento, para el reloj de bolsillo— está impulsado por un sistema de doble barrilete. Los dos barriletes, directamente conectados entre sí, proporcionan una reserva de marcha de 10 días.
La corona del RM 020 es un componente excepcional. Ha sido manufacturada por Cheval Frères, empresa dedicada a la realización de piezas especiales de relojes desde hace 165 años, y ha supuesto un verdadero reto técnico. Para la creación de la cadena, el cierre, la cubierta de la corona y el soporte son necesarias 580 operaciones, 140 de ellas dedicadas al acabado y 126 al control de calidad. El conjunto de la corona cuenta con nada más y nada menos que 189 piezas: 27 para la corona propiamente dicha, 20 para la cubierta, 16 para el cierre, 65 para la cadena y 61 para el soporte independiente.
La seguridad adicional de esta corona evita un armado excesivo del reloj, que podría causar daños a la tija del mecanismo de cuerda o ejercer una presión excesiva sobre el barrilete de muelle real.
Además, el RM 020 consta de una cadena de reloj de titanio con un mecanismo de enganche rápido, aunque también puede utilizarse a modo de pendulette de bureau colocándolo sobre un accesorio de soporte de escritorio. El RM 020, posiblemente la «máquina del tiempo» más perfecta, sintetiza a la perfección los valores relojeros fundamentales del siglo XVIII y los fusiona con la tecnología y la estética del siglo XXI.