Richard Mille está encantado de unirse al constructor naval suizo SP80 en el nuevo reto que se ha planteado: batir en 2024 el récord del mundo de velocidad a vela. North Thin Ply Technology (NTPTTM), líder mundial de materiales preimpregnados, también participa en esta aventura proporcionando el carbono TPT® para la estructura del barco. Ahora, el equipo puede pasar a la etapa crucial de la fabricación de este velero, que deberá alcanzar los 150 km/h (80 nudos) únicamente con la fuerza del viento. La velocidad, la aeronáutica y los desarrollos extremos han cautivado desde siempre a Richard Mille.
Cuando NTPTTM —socio de Richard Mille desde hace muchos años, que produce el carbono TPT® para las cajas de los relojes de la marca en exclusiva— presentó el proyecto, apoyar esta increíble odisea parecía una obviedad.
«Animada por la voluntad de alcanzar su objetivo, SP80 no duda en romper los códigos de la vela, y es esta misma audacia la que guía a la marca desde hace 20 años. En esta joven empresa encontramos la efervescencia de un equipo entusiasta y con talento»
Tim Malachard, director de marketing de Richard Mille.
Creada en 2018 por Xavier Lepercq, Benoît Gaudiot y Mayeul van den Broek, tres ingenieros apasionados del kitesurf, los veleros de todo tipo y las travesías oceánicas, SP80 agrupa actualmente a unos cuarenta ingenieros y estudiantes procedentes de la EPFL (Escuela politécnica federal de Lausana). Para batir el récord mundial de velocidad establecido en 65 nudos (121 km/h) en 2012, el equipo de SP80 se ha comprometido a buscar una solución totalmente innovadora.
Está desarrollando un velero con un diseño único en el mundo, de 7 metros de largo y 6 de ancho, con un casco fabricado íntegramente de carbono TPT® e impulsado por un ala de kitesurf de más de 20 m de envergadura.
A medio camino entre barco, avión y coche de Fórmula 1, el departamento de estudios ha desarrollado un foil específico llamado «superventilante», que adhiere literalmente el velero a la superficie del agua para garantizar su estabilidad a altas velocidades. Esta tecnología evita así el fenómeno de cavitación, es decir, la vaporización del agua procedente de una depresión demasiado fuerte que afecta al rendimiento.
También se ha patentado un sistema de gestión de la potencia, que transmite toda la potencia del ala de kite al foil del barco manteniendo la estabilidad a alta velocidad. No hay duda de que un diseño como este marcará un antes y un después.
«Esta colaboración es el encuentro entre dos empresas comprometidas con la búsqueda del rendimiento, la excepción y la innovación. Nos parecemos hasta en nuestros respectivos procesos de producción, en torno a un material, el carbono TPT®, presente en la composición de los relojes Mille y de nuestro barco. La implicación de Richard Mille en la aventura SP80 es todo un orgullo y una fuente increíble de motivación para nuestro joven equipo».
Mayeul van den Broek, cofundador de SP80